dilluns, 31 de desembre del 2012

Etapa 1: de Chennai a Pondicherry

Ayer por mañana temprano 9 equipos y sus rickshaws esperaban nerviosos en el párking del Residency Towers Hotel de Chennai. Habían estado dos días cogiéndole el tranquillo al vehículo y a la manera de conducir de los indios por igual, y ya se sentían preparados para partir hacia el sur armados con un mapa y mucho buen humor.
Había gente de todo el mundo: australianos, surafricanos, británicos, suizos... Y nosotros, el equipo español. Algunos nos disfrazamos para la ocasión; en nuestro caso hicimos un pequeño homenaje a La carrera del siglo. Yo al menos iba tarareando mentalmente la canción cuando bajaron la bandera y Jose se metió de lleno dentro del terrible tráfico urbano...
El día avanzó sin mayores incidentes. En nuestro caso, claro. Más tarde supimos de un par de equipos que tuvieron problemas mecánicos al más puro estilo hollywoodiense: unos se quedaron sin frenos y al equipo 4 se le cayó medio motor al suelo. Nosotros decidimos no forzar el nuestro y mantenernos a la línia de los 40 km/h, aunque eso supuso que fuéramos todo el día mal de tiempo y que hasta nos alcanzase la tormenta que se había ido formando en la bahía. Tampoco ayudó el que nos pasásemos de largo del primer fuerte y tuviésemos que retroceder 45 min. Pero bueno, al final no fuimos los últimos y llegamos que aún faltaban 15 minutos para el cierre de la meta, al atardecer.
2 horas más tarde, duchados y peinados, nos reunimos con los demás en la fiesta de fin de año, donde contamos las primeras anécdotas y nos reímos de lo sucedido en este primer día de carrera.

Nosotros en la línea de salida.

¡La prensa acosándonos a preguntas!

Aravind, el orquestrador de todo el follón.
¡En Tamil Nadu los plátanos son rojos!

El "Shore temple" de Mamallapuram. Jose lleva puestas las gafas de filmar.


Detalle de un rótulo en tamil.

Nuestro rickshaw despertó la curiosidad de los locales.

¡A medio camino de repente se echó a llover intensamente!